Esta semana llego con dos días de retraso ya que me ha sido
imposible publicar el lunes. Pido disculpas.
Pero ya estoy aquí y creo que estaría bien
contaros de donde viene esta obsesión que tengo últimamente con las formas
rectangulares. Cuando lo cuente seguro que más de uno (y una) se sentirá
identificado. Todo nace de la más sencilla y tonta acción: las cosas que
tengo que hacer las apunto en un papel, y a las que son más importantes o
prioritarias les dibujo un recuadro alrededor. El problema está en que conforme
pasan los días considero que son importantes todas por diferentes motivos. Al final el papel está lleno de marcos de diferentes intensidades y
grosores, debido al distinto número de pasadas que le haya dado a cada uno,
según los distintos grados de importancia que le doy a cada una de las cosas
apuntadas... Y así en un bucle infinito hasta que cojo otro papel y comienzo de
nuevo el ritual.
Por ese motivo hago esto. Tantas
pequeñas e importantes cosas cotidianas se merecen un reconocimiento, y este es
el mío.
Acrílico y rotulador sobre papel · 25x25
Acrílico y bolígrafo sobre papel · 22x22
Técnica mixta sobre papel · 25x25
Técnica mixta sobre papel · 25x25
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